La irrupción en el despacho universitario de Félix Fernández de Castro se suma a las pintadas y correos amenazantes de los últimos días


3-7-2008 – LA NUEVA ESPAÑA (ASTURIAS)

Oviedo, P. R.
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Tres jóvenes, uno de ellos con sudadera con capucha y los otros dos con gafas de sol, irrumpieron poco antes de las cuatro de la tarde de ayer en el despacho universitario del profesor Félix Fernández de Castro, en la Facultad de Filología, para pedirle explicaciones sobre su rechazo académico al plan de estudios del asturiano presentado el pasado día 29 de junio en la Junta de la Facultad. «¿A ti paezte normal insultar de esa manera?», le dijeron. Los jóvenes conocían que Fernández de Castro tenía programada una revisión de exámenes a partir de las 4 de la tarde.

Los tres, de aspecto fuerte, accedieron al despacho instantes después de que Fernández de Castro regresara, tras sacar un café de la máquina instalada en el pasillo. Cuando volvía, se fijó en uno de ellos porque parecía mirar las notas en el tablón de anuncios. Los tres llamaron a la puerta y, una vez dentro, la cerraron y se pusieron delante de la mesa. Félix Fernández de Castro les dijo que se quitaran las gafas y, sin que mediaran mas palabras, salieron del despacho. El susto fue mayúsculo. «Ahora comprendo muy bien algunos testimonios que nos llegan de otros lugares donde ocurren este tipo de cosas, pero no van a doblegarme. Lo único que hice fue ganar una votación totalmente legítima y presenté una enmienda a cara descubierta».

La intimidación del profesor es una nueva escalada en la campaña de amenazas que Félix Fernández de Castro comenzó a recibir el mismo día de la votación. Primero fueron amenazas por correo electrónico -«hijo de puta fascista», es una bastante frecuente-, después pintadas en el campus del Milán -«Fernández de Castro: fíu de golpista», «Fernández de Castro: «Esto nun va a quedar asina», entre otras-, hasta llegar a la intimidación de ayer. El profesor formalizará hoy una denuncia en Comisaría, tanto del suceso ocurrido ayer como de las amenazas recibidas.

El rector de la Universidad, que había mantenido durante la mañana una entrevista con Fernández de Castro a causa de las pintadas, calificó los hechos de «barbaridad». En su opinión, «no se puede consentir. Naturalmente, tomaremos las medidas necesarias».